Ricardo Eliécer Neftalí Reyes Basoalto, “Pablo Neruda”

Cada día es más arrollador el avance y crecimiento de los hispanos en EE.UU. ya que para el 2025 constituiremos un 25% de la población del país, así lo informo el Centro de Investigación del Consejo de la Hispanidad.

Esta nueva realidad social debería servirles a los ideólogos del Tea Party para que cesara la ignominiosa persecución racial, ya que en el inmediato futuro, los hispanos seremos una poderosa y determinante fuerza política y económica en EE.UU.

Confirma este sendero, entre otras evidencias, el crecimiento de las pequeñas empresas en EE.UU.  de propiedad de hispanos, este auge ha sido del 44% en los últimos cinco años. Por esto, la Cámara Hispana de Comercio de Estados Unidos “USHCC”,  hizo un reconocimiento a las empresas más exitosas de propiedad de hispanos ya que  están contribuyendo a la recuperación de la economía del país.  Las empresas hispanas están generando nuevos emprendimientos, tres veces más rápido que sus contrapartes en la población general.

Durante un foro recientemente celebrado sobre inmigración, auspiciado por la Cámara de Comercio de los EE.UU. y la coalición “Asociación Para Una Nueva Economía de Estados Unidos”, al que asistieron diversas personalidades, entre ellas el exalcalde de Nueva York, Michael Bloomberg,  este le advirtió al Partido Republicano que si ignora a los hispanos se expondrá a un gran peligro político, y sentenció: “Si están contra el bloque de votantes de más rápido crecimiento en el país, ustedes y su partido no tienen futuro”.

Sin embargo, la ferocidad republicana del congreso estadounidense contra la hispanidad llega a límites desafiantes. En esta semana, han presentado un plan de presupuesto que elimina la inversión social y la inversión en infraestructura, eso si, financiando millonariamente  la agencia encargada de las deportaciones.

Los movimientos ultra nacionalistas como el “Tea Party”, tienen una histórica relación con las recesiones económicas, y son expertos en generar fallas en el establecimiento político-económico que aceleran el sufrimiento, la desesperación, y una caótica inseguridad social, ya que una vez causadas, brotan ellos como salvadores apropiándose de todos los servicios y negocios del Estado, convirtiéndolos en su lucro y beneficio personal, es decir, establecen una  Plutocracia, el gobierno de los dueños de la riqueza.

Ya en los años 30, la historia tiene una época aciaga cuando fueron obligados a abandonar EE.UU.  unos 500.000 mexicanos, a pesar de que la mayoría era México-estadounidenses, ciudadanos de esta nación.  Mae Ngai, historiador de la inmigración de la Universidad de Chicago,  llamo a esa perversidad “Un programa de desplazamiento racial”.

Hoy nuevamente, el criterio de estas mentes anquilosadas con un fervor por el odio racial esta imperando en el congreso estadounidense mediante estrategias muy calculadas, como el cínico programa de “apoyar” a inmigrantes que deseen regresar “voluntariamente” a sus países. Ya se han evidenciado otras acciones: Las maquiavélicas deportaciones masivas de “ICE”, aun constriñendo voluntades mediante el aparato policivo y judicial.

En el pasado debate presidencial Newt Gingrich, otro republicano de doble moral, sale a la palestra, con su ancestro hitleriano, proponiendo la “deportación masiva”, diciendo: “Creo que la mayoría de los trabajadores que están aquí que no tienen lazos con nosotros deben irse a sus países de origen inmediatamente. Creo que deberíamos hacer la deportación dramáticamente más fácil”, y  Mitt Rommey, no vacilo en argumentar que era un error que a los ciudadanos estadounidenses, hijos de extranjeros sin permiso legal,  la Constitución de los Estados Unidos de América les diera la nacionalidad.

Hay realidades que debemos saber afrontar: El 67% del pueblo estadounidense cree que el actual congreso de mayorías republicanas es el peor de la historia de los EE.UU.; y según una encuesta de opinión divulgada por la agencia noticiosa de Prensa Asociada  de Febrero de 2015, los estadounidenses opinan mayoritariamente que hoy el rumbo económico del país es más positivo y marcha por buen camino.

En el San Francisco Chronicle, el columnista Mark Morford, escribió que las personas con alta moral consideran a Obama como un “portador de luz” que podría ayudar a marcar el comienzo de una nueva existencia en el planeta.

Barack Obama, en su libro “La audacia de la Esperanza: Reflexiones Sobre Como Restaurar el Sueño Americano” explicó que cuando tenia 20 años, a través de su trabajo como organizador comunitario, había logrado comprender el poder de la espiritualidad para estimular el cambio social.

Apreciado Hermano Inmigrante Americano:

Cuando mantienes viva la esperanza, la esperanza te mantiene vivo. 
Se consciente de que la esperanza verdadera es activa, o sea, te pide moverte y actuar. No se trata de esperar con los brazos cruzados, sino de dar lo mejor, de sembrar y cuidar para poder cosechar.

Nuestro futuro y el de nuestros hijos, sólo lo PODEMOS construir aquí y ahora.

Con mi abrazo fraterno,  

ARNOBY BETANCOURT
Organizador Comunitario
ESCUELA DE DERECHOS HUMANOS DE TEXAS
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